miércoles, 14 de julio de 2010

MANIFIESTO DE LOS SALTEÑOS

Los Salteños aquí reunidos, nos hemos convocado para defender el don del matrimonio y la familia.

Pertenecemos a distintos grupos y tenemos diferentes creencias, pero compartimos una misma convicción sobre la importancia de estas instituciones.
Sobre el matrimonio y la familia se edifica la sociedad.
La nación es la suma de las familias que comparten un territorio, idioma, costumbres y pautas morales.
Las familias se constituyen por una vocación de trascendencia superadora que respeta los mandatos de la naturaleza.
El varón y la mujer formalizan el matrimonio en orden a la unión, procreación y educación de los hijos.
La diversidad de los femenino y lo masculino garantiza la complementariedad, desde la cual se consolida la sana personalidad de los hijos.
Los matrimonio con o sin hijos, son los llamados legítimamente a constituirse en verdaderos hogares para que hijos sin padres puedan gozar del derecho inalienable a tener papa y mama.
Las leyes y normas que regulan la adopción, deben tener la agilidad necesaria para que el ejercicio del derecho de todo hijo en estado de orfandad a contar con padres según el orden natural, sea pronto y oportuno.
Ningún supuesto derecho a adopciones diferentes puede ni debe anteponerse a los que resultan inalienables, por su condición de fundamentos del bien común. La familia Argentina compuesta por mama y papa, tiene el derecho y la obligación de permanecer vigente sin deformaciones que la desnaturalicen.
Los Senadores Nacionales tienen el deber de proteger todo aquello que resulta fundamental para la existencia misma de la Nación.

Salta, 13 de Julio de 2010.

No hay comentarios:

Publicar un comentario